Alrededor del 56 por ciento de los alemanes considera que es demasiado pronto para flexibilizar las drásticas restricciones de la vida cotidiana debidas al coronavirus a partir del 20 de abril, reveló una encuesta del instituto demoscópico Civey publicada hoy por la revista «Business Insider».
El sondeo añade que casi el 30 por ciento de los encuestados considera que una flexibilización a partir del 20 de abril sería apropiada, mientras que solo el 9,4 por ciento opina que debería entrar en vigencia antes de esa fecha.
Las actuales medidas que afecta la vida pública en Alemania están limitadas por el momento hasta el 19 de abril.
La canciller alemana, Angela Merkel, planea debatir el modo de proceder con los primeros ministros de los estados federados el 15 y el 19 de abril.
Los datos recogidos por Civey indican que los encuestados creen que primero deberían volver a abrir las tiendas así como las escuelas y guarderías, seguidas de las peluquerías, los parques infantiles, los restaurantes y cafés, las iglesias, los museos y los gimnasios.
En vista de los éxitos iniciales en la contención de la epidemia de coronavirus en el país, el ministro de Salud, Jens Spahn, opina que tal vez sería posible tomar medidas cautelosas para salir del confinamiento después de las vacaciones de Semana Santa.
«Si se mantiene esta evolución de las cifras de contagios, podremos hablar con los primeros ministros sobre una vuelta gradual a la normalidad después de las vacaciones de Semana Santa», comentó Spahn en declaraciones que publica hoy el diario «Handelsblatt».
El gabinete de crisis convocado por el Gobierno alemán para afrontar la epidemia originada por el coronavirus volverá a reunirse hoy.
Por la tarde, Spahn, la ministra alemana de Familia, Franziska Giffey, y el presidente del Instituto Robert Koch (RKI), Lothar Wieler, proporcionarán información sobre la situación actual del coronavirus en Alemania. El RKI de Berlín es la agencia oficial alemana de control de enfermedades contagiosas.
Berlín, 9 abr (dpa)
