Cuando el edificio del archivo de Colonia se derrumbó hace exactamente 6 años (3 de marzo de 2009), los documentos milenarios que detallaban la historia de la ciudad se dieron por perdidos.
Tras la caída del edificio de seis plantas, supuestamente debido a la inestabilidad causada por los trabajos de excavación del metro, no había muchas esperanzas de recuperar los archivos.
En junio comenzó la investigación criminal para esclarecer la razón del derrumbamiento en la que murieron dos personas y se produjeron daños materiales de 1000 millones de euros. Lo indicios indican que se produjeron agujeros en una de las paredes del edificio debido a las excavaciones subterráneas, y la acumulación de barro, piedritas y tierra hicieron que el suelo del archivo se desgarrase.
Los expertos temían que el cráter originado por el desplome del edificio se convertiría en la tumba de una de las colecciones municipales más ricas del norte de Europa y que incluía decretos de emperadores, listas de residentes medievales y siglos de registros de comerciantes.
Sin embargo, las autoridades informaban este lunes que se ha conseguido recuperar el 96% de la colección. “Un gran éxito”, según la directora del archivo, Bettina Schmidt-Czaia.
El problema es que el nuevo edificio que contendrá el archivo no estará terminado hasta 2019. Esto significa que la colección deberá dividirse y guardarse en diferentes emplazamientos, dificultando su acceso. Incluso cuando el edificio se inaugure, podrían pasar semanas o meses hasta que los documentos estén disponibles en versión digital o en papel.
Fuente: dpa
