El presidente de la Asociación de Cámaras de Industria y Comercio Alemanas (DIHK), Peter Adrian, insistió hoy en que Alemania reduzca los procedimientos de inmigración de mano de obra cualificada, en declaraciones a dpa.
«Incluso en la crisis actual, la escasez de trabajadores cualificados es el segundo mayor riesgo empresarial para las compañías, después de los costes energéticos», señaló.
Adrian apuntó que, debido a la falta de trabajadores, las empresas tienen que rechazar cada vez más pedidos y reducir sus servicios. «Por ello, muchas empresas cuentan con que se facilite aún más la afluencia de trabajadores cualificados de terceros países», continuó.
Actualmente, el Gobierno federal trabaja en la reforma de la ley de inmigración puesta en marcha en 2020.
Según Adrian, la normativa actual ha facilitado el acceso a los trabajadores cualificados de países no pertenecientes a la Unión Europea (UE). «Pero la experiencia en las empresas demuestra que muchas cosas siguen siendo demasiado complicadas, tardan demasiado o incluso fracasan», opinó.
Agregó que, para las empresas, es importante que los inmigrantes no tengan que acreditar una formación totalmente equivalente a la alemana. «La experiencia demuestra que las cualificaciones que faltan pueden suplirse a menudo en el transcurso del trabajo diario», dijo.
Para que el comienzo en la empresa sea lo más exitoso posible, abogó además por una mayor promoción del aprendizaje del idioma alemán mientras se está en el extranjero.
Adrian criticó que el tiempo de espera para una cita para solicitar un visado suele ser de muchos meses. Y agregó que se necesita más: «Una vivienda adecuada, el cuidado de los niños. Si queremos inspirar a personas de todo el mundo para que trabajen en Alemania, tenemos que ofrecerles la posibilidad de sentirse bienvenidos aquí».
Berlín (dpa) – Lun, 28.11.22, 11.33 am