viernes, marzo 29, 2024
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Berlín «no es lo que era»: Macras y el arte de pensar desde la danza

city-653425_1280Berlín, ¿centro de efervescencia cultural, faro de nuevas tendencias, epicentro del underground? «Definitivamente no es lo que era», cuenta en entrevista con dpa la coreógrafa argentina Constanza Macras, que emigró a Alemania hace 20 años y vivió la metamorfosis de la ciudad en paralelo a su salto profesional.


«En los años 90 había muchísimas casas ocupadas», recuerda la coreógrafa que se presentará este viernes en Buenos Aires. En Alemania aquel fenómeno de «okupas» iba de la mano de iniciativas del under, de colectivos de artistas, de la ebullición experimental en sótanos y pisos compartidos de un Berlín que se había nutrido, durante décadas, de quienes buscaban alquileres económicos y huían del servicio militar.

«Ahora la ciudad es un gran hallazgo inmobiliario”, describe Macras esa gentrificación que ha avanzado a paso firme.

Y es que, al ser declarada nuevamente capital de la Alemania reunificada, el boom inmobiliario expulsó de la metrópoli a artistas experimentales de pocos fondos y soterró muchos de los espacios en los que «la falta de recursos genera(ba) creatividad, formas creativas de solucionar cosas simples», observa la coreógrafa.

Tal vez esa mirada, que parecería nostálgica o un deseo por atrapar un Berlín artísticamente pujante que se esfuma, es resintetizada por Macras en una obra dedicada a «la realidad de los paisajes urbanos que avanzan sin volver atrás».

Así es como describe el núcleo de «The Past», obra con la que se presenta este viernes en Buenos Aires junto a su compañía, Dorky Park, integrada por bailarines profesionales y amateurs de entre cuatro y 72 años.

¿Cuál fue el disparador de la obra? «La relación entre arquitectura, memoria y retórica», cuenta Macras.

Ella, que admite tener una relación «complicada» con su propio pasado en Argentina, observa cómo los recuerdos están intrínsecamente ligados a veredas, monumentos, construcciones y arquitecturas transitadas.

Recordar el hogar de la infancia, la casa en la que se vivieron los primeros años, «evoca toda una serie de sensaciones que uno tuvo con respecto a esos espacios».

¿Qué sucede con los recuerdos cuando esa casa ha sido derruida? O, a la inversa, ¿cómo convertimos los lugares físicos conocidos en herramientas para recordar?

En su obra la coreógrafa toma un ejemplo muy particular: la reconstrucción de Alemania después de la Segunda Guerra Mundial. Si bien se trata de un «macroespacio», tan genérico como puede parecer por descuido la historia, las arquitecturas de las ciudades bombardeadas y reconstruidas se funden en trauma en una memoria que también moldea recuerdos individuales, personales y singulares.

Para la obra, Macras mantuvo «una serie de charlas con testigos presenciales del bombardeo de Dresde en febrero de 1945».

En Alemania, que reconstruyó tantas ciudades tras la guerra, «hubo una decisión sobre cuál es el pasado que vale la pena preservar», comenta. «Como una traición a la historia o como una necesidad de borrar el pasado».

Macras concibe la danza como un instrumento político que hace brotar en las superficies problemas sociales solapados.

En otras obras ha tratado temas proverbiales como la discriminación de inmigrantes. «Muchas acciones que en tiempos pasados requerían confinamiento ya no lo exigen, pero nuestra sociedad aún comparte con la era clásica el supuesto de que la pérdida de los derechos civiles está relacionada con la locura, la inmigración y la pobreza», criticaba en su obra «Berlin Elsewhere».

En «The Past», Macras recorre conceptos esenciales de la construcción de la identidad, la memoria y el tiempo, tomando como base «El arte de la memoria» de la historiadora británica Frances Amelia Yates.

Y así como en otras oportunidades experimentó llevando sus obras a escena en bares, tiendas de compras o carnicerías abandonadas, la presentación en Buenos Aires será en una sala tradicional. Pero promete ser vertiginosa.

Florencia Martin (dpa)

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