Las ciudades alemanas a orillas del mar Báltico retoman lentamente la actividad turística: la costa este de Schleswig-Holstein acogió hoy a los primeros bañistas sedientos de sol y playa tras la relajación de las medidas contra la propagación del coronavirus.
Los propietarios de segundas viviendas y campistas permanentes pudieron utilizar hoy sus respectivos alojamientos en el estado federado de Schleswig-Holstein por primera vez desde que en marzo Alemania impusiese medidas de distanciamiento y restricciones al contacto social. Fueron muchos los que aprovecharon las buenas temperaturas para disfrutar de un día de playa .
La apertura de hoteles y restaurantes tendrá lugar a partir del 18 de mayo, momento en que las personas procedentes de otros estados alemanes podrán disfrutar también de esta parte de la costa báltica germana. Según informó Kristina Wenske, del servicio de turismo de Timmendorfer Strand – municipio de Schleswig-Holstein- se está registrando un aumento de las reservas a partir de esa fecha.
Ese mismo día, las empresas de alquiler de sillas de playa podrán ofrecer sus servicios de nuevo, eso sí, bajo estrictas condiciones: tendrán que estar ubicadas a 3,5 metros unas de otras y desinfectadas entre un usuario y el siguiente.
Las fechas difieren ligeramente en Mecklemburgo-Pomerania Occidental, estado federado del noreste alemán, allí los propietarios extranjeros pudieron acceder a sus segundas residencias en la costa el pasado uno de mayo. Desde hoy se permite que los restaurantes abran de nuevo sus puertas, bajo estrictas condiciones de higiene y normas de distancia.
Las sillas de playa podrán ser alquiladas a partir del 11 de mayo. Los hoteles, apartamentos vacacionales y campings podrán ser utilizados de nuevo por los residentes de Mecklemburgo-Pomerania Occidental a partir del 18 de mayo. Está previsto que el 25 de mayo se permita la entrada a los turistas procedentes de otros estados federales alemanes.
Schleswig-Holstein (Alemania) 9 may (dpa)
