Unas 20.000 personas participaron hoy en Múnich en una marcha en repudio al racismo y a la violencia policial tras la muerte del afroamericano George Floyd en un operativo en la ciudad estadounidense de Minneapolis.
Debido a las restricciones que rigen para frenar la pandemia de coronavirus en el estado de Baviera, los organizadores tenían permiso para manifestarse con un máximo de 200 personas. «Las reglas de distanciamiento no están siendo respetadas», señaló a dpa un agente.
En otras ciudades del país también hubo marchas en las que los participantes se desplazaron vestidos de negro y en silencio.
La muerte de Floyd en el marco de un brutal operativo policial el 25 de mayo ha generado protestas y disturbios en varias ciudades de Estados Unidos.
En Múnich, se escucharon algunos gritos de «Black Lives Matter» (las vidas negras importan), lema que guía a las protestas desde la muerte de Floyd.
En Fráncfort, unas 8.000 personas participaron en una marcha que transcurrió de forma pacífica y en la que los manifestantes se atuvieron a las reglas de higiene para prevenir contagios, según informó la Policía.
Por su parte, la delegada de Integración del Gobierno germano, Annette Widmann-Mauz, instó a la población a adquirir mayor conciencia sobre la discriminación racial. «El racismo también existe en Alemania: en la escuela, en la calle, en el trabajo, en los autobuses y trenes, en el círculo de amigos», dijo la política democristiana a los periódicos del grupo mediático Funke.
Añadió que el racismo debe ser reconocido, nombrado y combatido en todas las áreas. Widmann-Mauz advirtió que el segregacionismo es el caldo de cultivo ideológico para la violencia de extrema derecha.
Los datos oficiales constatan que los insultos y discriminación por el color de piel están muy extendidos en Alemania.
Según declaraciones del director de la Oficina Antidiscriminación de Alemania, Bernhard Franke, a dpa: «La discriminación es un fenómeno cotidiano».
Desde su fundación, en el año 2006, la Oficina Antidiscriminación de Alemania registró alrededor de 28.000 consultas. «Las cifras hablan por sí solas, no se trata de hechos aislados», concluyó Franke.
Múnich, 6 jun (dpa)
