El presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, ha pedido al público que reduzca el contacto social mientras el país lidia con su cuarta ola de infecciones por Covid-19, mientras que las autoridades anunciaron cuatro casos sospechosos adicionales de la nueva variante de Omicron el lunes.
«Es importante que todos actuemos juntos ahora», escribió Steinmeier en un editorial para el periódico Bild am Sonntag. «Vamos a ceñirnos a las reglas, vamos a reducir nuestros contactos una vez más. Hagámoslo para que las escuelas y guarderías no vuelvan a cerrar, para que no tengamos que volver a cerrar por completo la vida pública».
Sus comentarios se produjeron un día después de que las autoridades sanitarias alemanas anunciaran un número récord de casos de Covid-19, incluidos cuatro casos sospechosos de Omicron, además de los tres ya confirmados el domingo.
Las salas de hospital en algunos estados están a su capacidad, y los pacientes en algunos casos tienen que ser redistribuidos por todo el país. Desde el viernes, un total de 50 pacientes gravemente enfermos de Covid-19 han sido trasladados a estados con camas de cuidados intensivos libres, según un funcionario del gobierno.
Mientras tanto, los hospitales están posponiendo cada vez más la cirugía electiva para tratar los casos de Covid-19. Las operaciones regulares y programadas ya no son posibles en más de tres cuartas partes de los hospitales del país, según la Asociación Alemana de Hospitales.
La ministra interina de Investigación, Anja Karliczek, pidió a los legisladores que impongan regulaciones que exijan a las personas restringir sus contactos, incluidos los completamente vacunados, en línea con las recomendaciones de la Academia Nacional de Ciencias Leopoldina.
«La política debe seguir los consejos de la ciencia sin dudarlo. No debemos perder más tiempo», dijo Karliczek a dpa.
Leopoldina pidió el sábado la rápida imposición de prohibiciones de contacto durante varias semanas, independientemente del estado de vacunación, para contrarrestar la cuarta ola.
El instituto también pidió la vacunación obligatoria, al menos para los trabajadores de la salud.
El presidente de las Cámaras alemanas de Industria y Comercio (DIHK), Peter Adrian, dijo que «realmente espera sinceramente» que la economía alemana pueda salvarse de otro confinamiento.
«Las empresas en una amplia variedad de sectores han sido tan golpeadas por los eventos anteriores que creo que ya no sería razonable», dijo a Bayerischer Rundfunk el lunes.
El debate en torno a los esfuerzos para frenar la cuarta ola de casos ha ganado mayor urgencia con la llegada de Omicron, una nueva cepa potencialmente más transmisible de Covid-19.
Alemania ya tenía tres casos confirmados de la variante Omicron el lunes por la tarde, con otro caso sospechoso en Baja Sajonia y otros tres casos sospechosos en Hessen a la espera de la secuenciación del genoma.
El Centro Europeo para el Control de Enfermedades ha dicho que la cepa podría reducir significativamente la efectividad de las vacunas disponibles y aumentar el riesgo de reinfección.
Un nuevo equipo de crisis de coronavirus planeado por los socios entrantes de la coalición de Alemania debería comenzar a trabajar «lo antes posible», según el gobierno federal saliente.
La canciller saliente, Angela Merkel, y el canciller designado, Olaf Scholz, están en estrecho contacto sobre el tema, dijo el lunes en Berlín el portavoz del gobierno, Steffen Seibert.
En su acuerdo de coalición, los socialdemócratas de centroizquierda, los demócratas libres favorables a los negocios y los Verdes se han comprometido a establecer un comité permanente de crisis federal-estatal.
Berlín (dpa) – Mar, 30.11.2021, 12.37 pm