El canciller Olaf Scholz y miembros de su gabinete partieron este miércoles hacia La Coruña para las consultas del gobierno germano-español, que tienen lugar por primera vez en nueve años.
El vicecanciller y ministro de Economía, Robert Habeck (Verdes), el ministro de Hacienda, Christian Lindner (FDP), y la ministra de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock (Verdes), viajaban a bordo del nuevo transporte de tropas de la Bundeswehr. La atención debería centrarse en los temas de seguridad y defensa, economía y energía, investigación y educación, así como en la política europea.
Las consultas originalmente estaban previstas para durar dos días (miércoles y jueves). Sin embargo, debido a que la cumbre de la UE comenzó el jueves en Praga, se acortaron a un día. Las consultas gubernamentales tuvieron lugar por última vez en Berlín en 2013.
Además de la guerra de agresión rusa y sus consecuencias, los temas esta vez deberían incluir la construcción del oleoducto Midcat de España a Francia, que defienden Alemania y España. Se extenderá desde Barcelona a través de los Pirineos hasta la conexión con la red francesa en Barbaira, en el sur de Francia. En España el tubo está completo hasta Hostalric, 106 kilómetros al sur de la frontera, en Francia faltan unos 120 kilómetros. El proyecto fue cancelado en 2017 por falta de rentabilidad.
El gas natural que fluirá hacia el norte por el conducto podría obtenerse de diferentes fuentes en España y Portugal, ya que ambos países cuentan en conjunto con un total de siete terminales de GNL. También hay dos gasoductos al proveedor de gas Argelia en el norte de África. Francia rechaza el oleoducto.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, dijo al «Frankfurter Allgemeine Zeitung» antes de las consultas gubernamentales que el oleoducto afectaría a toda la UE. En vista de la guerra en Ucrania, los intereses de Europa, no los de los individuos, deben tener prioridad.
Berlín/La Coruña (dpa) – Jue, 06.10.22, 10.18 am