Los líderes alemanes rindieron hoy homenaje a la misión de 20 años en Afganistán, en la que perdieron la vida 59 militares germanos, en una ceremonia celebrada en Berlín.
En el llamamiento final central para la misión en Afganistán, el presidente Frank-Walter Steinmeier advirtió que no se deben sacar conclusiones erróneas de la toma del poder por parte de los talibanes.
«Para mí, una cosa es cierta: la caída de Kabul fue un punto de inflexión. Estamos en una encrucijada que nos obliga a pensar de nuevo y de forma autocrítica sobre nuestra responsabilidad en el mundo, nuestras posibilidades y sus límites», dijo Steinmeier.
«Espero que dentro de 20 años no miremos atrás a esta encrucijada y digamos: la resignación y la retirada era la respuesta a Afganistán. Sería una lección equivocada», subrayó.
Steinmeier se refirió al papel de Alemania como país más poblado de la Unión Europea y cuarta economía del mundo. En el contexto de la historia de Alemania y también de sus propios intereses, dijo, no debe ser indiferente a lo que ocurre en el mundo.
«Por eso nuestra respuesta no debe ser la retirada del mundo», manifestó Steinmeier. «Estoy convencido: la política exterior y de seguridad alemana después de Afganistán debe ser más honesta, más inteligente y más fuerte», agregó. También pidió que Alemania se fortaleciera, incluido el aspecto militar.
Por su parte, la ministra de Defensa, Annegret Kramp-Karrenbauer, hizo hincapié en que «ningún despliegue anterior ha dejado su huella en la Bundeswehr como lo hizo este despliegue en Afganistán», según dijo en la ceremonia celebrada en el recinto del Ministerio que dirige.
«Ninguno antes fue tan largo, tan intenso, tan peligroso», dijo a los asistentes, entre los que se encontraban el presidente Steinmeier y la canciller, Angela Merkel.
Kamp-Karrenbauer destacó que la Bundeswehr (Fuerzas Armadas alemanas) cumplió su mandato emitido por el Parlamento, y alertó contra las expectativas exageradas de los despliegues militares en el extranjero. «Las aspiraciones alemanas en Afganistán eran mayores que lo que la Bundeswehr podía lograr», dijo.
Pero también señaló que durante 20 años no ha habido ninguna amenaza terrorista para la alianza occidental proveniente de Afganistán.
El despliegue inicial se produjo en respuesta al ataque del 11 de septiembre de 2001 contra objetivos en Estados Unidos, incluido el World Trade Center de Nueva York.
La ministra subrayó que un ejército no podía lograr cosas como la construcción de la sociedad civil, el establecimiento de una democracia o la construcción de una economía.
La Bundeswehr puso fin a su misión que últimamente formaba parte de la misión de entrenamiento Resolute Support de la OTAN el 29 de junio y abandonó el campamento de campaña en Mazar-i-Sharif.
Refiriéndose a la rápida victoria de los talibanes al retirarse la alianza, Kramp-Karrenbauer dijo que las fuerzas gubernamentales afganas habían sido bien entrenadas, «pero un ejército tiene que saber por qué lucha».
La ceremonia comenzó con la colocación de una corona de flores en el monumento a la Bundeswehr. Estaba previsto que concluyera con un gran desfile frente a los edificios del Parlamento por la tarde.
Berlín (dpa) – Jue 14 Oct 2021, 8.30 am