Alemania sitúa 800 policías en frontera polaca para vigilar migración

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Alemania desplegó 800 policías en la frontera con Polonia para combatir el aumento de la inmigración ilegal procedente de Bielorrusia y no descarta reforzar más la seguridad en caso necesario.

«Controlaremos de cerca la zona fronteriza y la frontera ‘verde’ con Polonia», indicó el ministro alemán del Interior, Horst Seehofer, en declaraciones publicadas hoy por el diario «Bild am Sonntag».

Seehofer añadió que, en caso de ser necesario, se consideraría la opción de realizar controles fronterizos.

«La semana pasada notificamos a Bruselas la prórroga de los controles en la frontera germano-austriaca durante otros seis meses. Si la situación en la frontera germano-polaca no se alivia, consideraremos dar este paso en coordinación con Polonia (…)», dijo el ministro, si bien puntualizó que esa decisión tendrá que ser tomada por el próximo gobierno alemán, que previsiblemente se formará en diciembre.

Los controles fronterizos fijos entre los 26 países del espacio Schengen no existen. Sin embargo, es posible hacer excepciones en situaciones excepcionales o de peligro.

Según Seehofer, no debería haber más controles fronterizos en Europa «siempre y cuando la protección de las fronteras exteriores funcione».

La Unión Europea (UE) acusa al dirigente bielorruso, Alexander Lukashenko, de llevar a los refugiados de las regiones en crisis a la frontera exterior de la UE de forma organizada.

Lukashenko había anunciado a finales de mayo que ya no impediría a los inmigrantes viajar a Europa, como reacción al endurecimiento de las sanciones occidentales contra la antigua república soviética.

El número de inmigrantes que intentaron entrar ilegalmente en la Unión Europea a través de Bielorrusia creció considerablemente en los últimos meses. Los países fronterizos con Bielorrusia que más han sufrido esta afluencia son Polonia, Lituania y Letonia.

Hasta el jueves, la Policía germana había registrado 3.751 entradas no autorizadas en el país en conexión con el flujo migratorio bielorruso. En lo que va de año, la cifra se sitúa en 6.162.

Según la autoridad policial, La frontera germano-polaca es el punto central desde el que intentan acceder. Muchos de los migrantes y refugiados que llegan allí proceden de Irak, Siria, Irán, Afganistán y Pakistán.

Seehofer propuso recientemente a su homólogo polaco, Mariusz Kaminski, la realización de patrullas conjuntas germano-polacas en la frontera, especialmente en el lado polaco, pero Varsovia no se ha comprometido hasta ahora.

La situación está suscitando debate en Alemania y determinados grupos están tomando posiciones. El sábado por la noche, la policía alemana localizó a unos 50 individuos sospechosos de estar asociados al grupo escindido de extrema derecha «Der Dritte Weg» (La Tercera Vía), que se habían reunido en la frontera germano-polaca para actuar contra los migrantes.

La policía dijo que se incautó de esprays de pimienta, una bayoneta, un machete y porras.

Por otro lado, en la ciudad alemana de Guben, que limita con Polonia, se celebró hasta el domingo por la tarde una vigilia de 24 horas contra el racismo y por el derecho de asilo a la que asistieron un centenar de personas.

«No queremos dejar la región en manos de los neonazis. Queremos enviar una señal de que el asilo es y sigue siendo un derecho humano», decía un comunicado de los organizadores.

Berlín (dpa) – Lun 25 oct 2021, 9:05 am