Unas 300 empresas alemanas y 577 marcas utilizan el sistema frontal de etiquetado nutricional de alimentos Nutriscore, informado hoy el Ministerio alemán de Alimentación a dpa.
El sistema clasifica en cinco categorías el grado de valor nutricional que aportan los alimentos, lo que permite a los consumidores conocer de un vistazo la calidad del producto.
Los puntos se otorgan en base a una cantidad de 100 gramos y además del azúcar, la grasa y la sal, se tiene en cuenta la proporción de componentes alimenticios recomendados como la fibra, las proteínas o las frutas y verduras.
El resultado es un único valor global, que se muestra en una escala de cinco categorías fácilmente distintivas por colores y letras: desde la «A» sobre un fondo de color verde oscuro, que indica la mayor calidad nutricional, pasando por la «C» sobre fondo amarillo y terminando por la «E» sobre fondo rojo, que indica la puntuación menos favorable.
La normativa que sirve de marco para el uso conforme a la ley del etiquetado frontal Nutriscore entró en vigor en Alemania en noviembre de 2020, si bien algunos probadores ya lo utilizaron antes.
Este sistema fue desarrollado en Francia y las empresas que quieran utilizarlo deben registrarse en la agencia sanitaria gala y cumplir la normativa. Se trata de un complemento de las tablas nutricionales que son obligatorias en toda la Unión Europea (UE), las cuales se ubican en el dorso de los envases y suelen tener letra pequeña.
Según los datos, el uso de Nutriscore en Alemania ha sospechado gradualmente. En noviembre de 2021 hay un registro de 244 entradas alemanas con un total de 470 marcas.
El número de empresas participantes está creciendo de forma constante, indicó un portavoz del Ministerio germano de Alimentación. Si se incluyen las compañías con sede fuera de Alemania que venden sus productos con el logotipo Nutriscore en el mercado alemán o tienen previsto hacerlo, la cifra aumentará a 440 empresas y 719 marcas.
«Pero todavía no todos los envases de los supermercados llevan un etiquetado nutricional comprensible. Solo cuando todos los productos alimenticios llevan la etiqueta Nutriscore, los consumidores podrán comparar de un vistazo el grado de equilibrio de los distintos productos», dijo por su parte la organización de consumidores Foodwatch.
A su juicio, el ministro alemán de Alimentación, Cem Özdemir, debe presionar a Bruselas para que el sistema sea obligatorio en toda la UE.
Berlín (dpa) – Lun, 23.05.22, 10.58 am