El gobierno federal pide a los alemanes que abandonen Irán

Imagen de Shima Abedinzade en Pixabay 

Las autoridades de Irán llevan semanas utilizando la violencia contra los manifestantes, hay muertos y heridos. El Ministerio de Relaciones Exteriores ahora está sacando más conclusiones, y advierte sobre todo a las personas con doble nacionalidad.

Ante la violenta acción de las autoridades contra las protestas en Irán, el gobierno federal ha pedido a los alemanes que se encuentren allí que abandonen el país.

«Para los ciudadanos alemanes, existe un riesgo concreto de ser arrestados arbitrariamente, interrogados y condenados a largas penas de prisión», advirtió este jueves el Ministerio de Relaciones Exteriores en su sitio web. Sobre todo, los llamados ciudadanos con doble nacionalidad, es decir, personas que tienen ciudadanía alemana e iraní, están en riesgo.

Recientemente, muchos extranjeros han sido arrestados arbitrariamente en Irán, según el Ministerio de Relaciones Exteriores en Berlín. Cualquiera que todavía esté allí debe comportarse con mucho cuidado y evitar manifestaciones y otras grandes multitudes. Las protestas contra el liderazgo autoritario de la República Islámica continúan desde mediados de septiembre. Continuaron el jueves también.

No está claro cuántos alemanes hay actualmente en Irán. El Ministerio de Relaciones Exteriores dijo que un «número bajo de tres dígitos» de alemanes y familiares estaba registrado en una «lista de prevención de crisis» en la embajada alemana. Dado que la inclusión en dicha lista es voluntaria y no hay obligación de informar, no se puede dar información más precisa sobre el número total estimado.

La ministra de Relaciones Exteriores, Annalena Baerbock, también justificó la solicitud con el hecho de que durante semanas hemos estado experimentando «la violencia brutal con la que el régimen iraní actúa contra sus propios ciudadanos». “Cómo late su juventud, su sociedad, muere gente en el proceso”, dijo el político verde poco antes del inicio de la reunión de ministros de Exteriores del G7 en Münster.

Las protestas continuaron el jueves. En Karaj, en el oeste de la capital, Teherán, numerosas personas salieron a las calles, como muestran videos distribuidos en Internet. La ocasión marcó el final del período de luto de 40 días tras la muerte de la joven iraní Hadis Najafi, quien, según los informes, fue asesinada a tiros por las fuerzas de seguridad durante las protestas en Karaj en septiembre. Las autoridades lo niegan. Najafi es ahora una de las figuras simbólicas de las protestas. En el Islam se acostumbra un período de luto de 40 días.

El líder religioso supremo de Irán, Ali Khamenei, describió recientemente las protestas como una «guerra híbrida» y culpó a las «potencias europeas insidiosas y maliciosas».

Las protestas fueron desencadenadas por la muerte de la kurda iraní Mahsa Amini, de 22 años. La brigada antivicio la arrestó por presuntamente violar los códigos de vestimenta islámicos. La mujer murió bajo custodia policial a mediados de septiembre. Desde hace casi siete semanas, decenas de miles se manifiestan contra las políticas represivas y el curso autoritario. Según activistas de derechos humanos, más de 280 personas fueron asesinadas y más de 14.000 arrestadas.

Berlín/Teherán (dpa) – Vie, 04.11.22, 10.24 am