Rara vez un partido alcanza por sí solo la mayoría absoluta en las elecciones federales en Alemania, por lo que los gobiernos en coalición son la norma en el país.
Desde el 2013, una coalición formada por la unión conservadora CDU/CSU y los socialdemócratas del SPD (llamada gran coalición o «negro-rojo» por los colores que caracterizan a ambos partidos) gobierna desde Berlín.
En función de los resultados de las próximas elecciones del 26 de septiembre, existen diferentes variantes de coalición, conocidas por los colores de los partidos que podrían formarlas. Son las siguientes:
NEGRO-ROJO: En el pasado, las alianzas entre los democristianos y los socialdemócratas se denominaban «gran coalición» («GroKo», en alemán), pero actualmente los dos partidos, antaño dominantes, no llegan a sumar ni el 50 por ciento en las encuestas.
La actual canciller, Angela Merkel, se ha apoyado en la coalición rojinegra durante 12 de sus 16 años de gobierno, y pese a las diferencias ideológicas entre el centro-derecha y el centro-izquierda, las alianzas han funcionado razonablemente bien. Una nueva edición no solo sería impopular, sino que además carecería de mayoría.
NEGRO-VERDE: En los estados federados de Hesse y Baden-Wurtemberg existe una alianza entre los democristianos y Los Verdes, si bien en el ámbito nacional esta sería una novedad. Desde que los democristianos aceptaron el abandono de la energía nuclear en 2011, se ha eliminado un punto de fricción entre ambas formaciones.
Sin embargo, siguen existiendo posiciones claramente divergentes sobre la protección del clima, la cuestión fiscal, la política social y la cuestión del límite de velocidad en las autopistas alemanas. Según las encuestas, dicha coalición no podría obtener mayoría.
Existe además un mal precedente entre ambos, ya que su gobierno de coalición en la ciudad-estado de Hamburgo terminó en 2011 con un rotundo fracaso y la convocatoria de elecciones anticipadas.
«JAMAICA» (NEGRO-VERDE-AMARILLO): La isla caribeña da nombre a una coalición de democristianos, ecologistas y los liberales del FDP, ya existente en el estado norteño de Schleswig-Holstein. Tras las elecciones al Bundestag de 2017, un primer intento a nivel nacional fracasó cuando el FDP se retiró, tras cuatro semanas, de las interminables conversaciones exploratorias. Los sondeos apuntan a que «Jamaica» obtendría una mayoría.
«SEMÁFORO» (ROJO-AMARILLO-VERDE): Pondría fin a la era democristiana tras 16 años de Merkel y estaría conformada por socialdemócratas, ecologistas y liberales. El candidato del SPD Olaf Scholz podría convertirse así en canciller. Las encuestas indican una mayoría a favor de un «semáforo». Existe un modelo en el estado de Renania-Palatinado, donde los tres socios ya gobiernan juntos en su segunda legislatura.
NEGRO-ROJO-AMARILLO: También llamada «coalición alemana» por la similitud de los colores del partido con los colores de la bandera germana. La primera alianza de CDU, SPD y FDP está a punto de comenzar a gobernar el estado de Sajonia-Anhalt. Según los últimos sondeos, a nivel federal los socialdemócratas serían la fuerza más fuerte de esa combinación, que tendría una mayoría segura.
NEGRO-AMARILLO: Un clásico en el repertorio político de la República Federal de Alemania. La CDU/CSU y el FDP han gobernado juntos durante décadas, incluso durante los 16 años de cancillería de Helmut Kohl (1982-1998). Los socios están unidos por su compromiso con la economía de mercado, pero hay diferencias en la política interior y social. Lejos de la mayoría en las encuestas de opinión.
ROJO-VERDE: El último canciller socialdemócrata, Gerhard Schröder (1998-2005), gobernó gracias a este tipo de alianza entre socialdemócratas y ecologistas. Entonces se impulsó el abandono nuclear. Poco probable según las encuestas actuales.
ROJO-ROJO-VERDE: Una alianza del SPD, Los Verdes y el Partido La Izquierda pondría a Alemania en un rumbo firme hacia la izquierda. Habría diferencias considerables en la política de seguridad, ya que La Izquierda rechaza las misiones de las Fuerzas Armadas alemanas en el extranjero y adopta una postura pro-rusa. Dicho problema no existe a nivel regional, donde coaliciones de este tipo gobiernan en el estado de Turingia y en la ciudad-estado de Berlín.
Berlín, 14 sep (dpa)