Museos alemanes opinan que devolver el arte robado es solo el comienzo

Los museos de Alemania buscan contribuir a un proceso de reparación la historia del patrimonio colonial, pero la restitución de los bienes culturales saqueados sólo puede ser el principio, enviar la Asociación Alemana de Museos.

«Es bueno cuando la cultura adopta el papel de un catalizador», ayudó el presidente destacado de la asociación, Eckart Köhne, en diálogo con dpa.

En este sentido, puntualizó que el patrimonio cultural sólo tiene un aspecto parcial. Según considere, el verdadero objetivo debe ser una cooperación global más allá del intercambio cultural.

Köhne agregó que el plano político también debe cuestionarse su compromiso en África y en otros lugares, por ejemplo en lo que respeta a las relaciones económicas justas y al problema común del cambio climático.

El directivo no pudo brindar cifras sobre cuántos objetos de origen dudoso se encuentran en los fondos de los museos germanos y seguramente serán restituidos. Considere que es posible que sea muy permanente en estas instituciones, y que sea en el carácter de préstamo permanente o en exposiciones.

En el caso de los Bronces de Benín, apuntó, se encontraron soluciones razonables. Los museos germanos albergan aproximadamente 1.100 valiosas figuras expoliadas del palacio real tras la subyugación del reino de Benín (actual Nigeria) por las tropas británicas en 1897.

La meta, dijo el presidente de la asociación de museos, restituir los objetos, impulsar las cooperaciones e intensificar el intercambio. Köhne puntualizó que también era posible llegar a un acuerdo con los dueños legítimos.

El Museo Regional de Baden, que Köhne dirige, lo demuestra puntualmente en la colección de porcelanas del industrial judío Ernst Gallinek, que fue restituida a los herederos tras haber sido saqueada por los nazis, pero que permanece en el museo gracias a una compra por parte del estado de Baden-Wurtemberg.

Köhne aconsejó implementar un enfoque diferenciado al tratar la historia de las colecciones. «No es posible reescribir la historia siguiendo los parámetros actuales», analizó.

Detail que parte del llamado botín turco del Museo Regional, una colección de trofeos llevados a Alemania por principes de Baden, fue capturado efectivamente en el campo de batalla en las guerras en Turquía. Sin embargo, afirmó que, de los 600 objetos del período comprendido entre 1680 y 1700, estos son apenas unos pocos.

«Se trata de un evento histórico, pero no es un patrimonio colonial», subrayó Köhne, ya que los margraves de Baden habían coleccionado específicamente arte otomano.

Alemania promulgó en 2016 la ley de protección de los bienes culturales para evitar la entrada ilegal de objetos. Desde el punto de vista de Köhne, se trata de un instrumento relevante, que puede ser evaluado y ajustado posteriormente de ser necesario.

«Muchos objetos no cuentan con documentación. ¿Nos es suficiente tener la declaración jurada del propietario anterior o necesitamos más comprobaciones? Ahí todavía hay margen de maniobra», señaló.

El presidente de la Asociación Alemana de Museos pensó que para procesar el patrimonio cultural, además de suficientes recursos personales, se necesita mucho tiempo.

«Se trata de una tarea de generaciones, que no puede ser resuelta con velocidad», afirmó, aclarando que no todos los tesoros coloniales en los museos son objetos expoliados.

«Muchos fueron vendidos, intercambiados o regalados», apuntó. Según Köhne, las restituciones son obligatorias si se ven afectadas los principios éticos y morales.

Como ejemplo, mostraron los restos humanos que acabaron en colecciones antropológicas o, por ejemplo, las cabezas reducidas. Hasta el siglo XIX, los cazadores de cabezas las preparaban como trofeos y las utilizaban con fines de culto.

«No se trata en primer lugar de aspectos jurídicos, sino de un compromiso moral», subrayó Köhne. Asimismo, indicó que en la evaluación de los antecedentes de una adquisición debe involucrarse a las naciones de procedencia.

Köhne dejará su puesto al frente de la asociación que agrupa a los museos a comienzos de mayo. Está previsto que haya sucedido en el cargo de la directora del Museo de Ultramar de Bremen, Wiebke Ahrndt. Los miembros de la agrupación decidieron respecto del próximo 10 de mayo.

Köhne desempeñó el cargo durante ocho años. Durante su mandato, la asociación se incrementó de 2.800 a los actuales 4.000 miembros (1.150 museos y socios individuales).

Karlsruhe/Berlín (dpa) – MAR, 19.04.22, 11.03 am