La nueva ministra alemana de Relaciones Exteriores, Annalena Baerbock, se mostró hoy claramente a favor de la unidad europea y de la amistad franco-germana, durante su primera visita oficial en París y Bruselas.
Europa es el «eje de la política exterior alemana», señaló Baerbock en una conferencia de prensa conjunta con su homólogo francés, Jean-Yves Le Drian, en París.
«Para ello, una Europa fuerte necesita fuertes impulsos franco-alemanes», agregó la flamante ministra, del partido Los Verdes.
En el marco del agravamiento de la crisis de Ucrania, Baerbock advirtió a Rusia de las graves consecuencias que tendría una nueva escalada.
Tras la reunión con Le Drian, la ministra germana viajó en tren a Bruselas, donde dialogó largamente con el encargado de Relaciones Exteriores de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, y con el secretario general de la alianza estratégica OTAN, Jens Stoltenberg. Para más tarde estaba prevista una reunión con el representante de Estados Unidos para el cambio climático, John Kerry.
El viernes, Baerbock volará a Varsovia para su visita de presentación ante su colega polaco, Zbigniew Rau.
Durante la conferencia de prensa conjunta con Le Drian, Baerbock recalcó que Europa sería más débil si Alemania no invierte en las relaciones entre París y Berlín.
Baerbock tuteó a Le Drian y le agradeció el «recibimiento tan cálido y amistoso».
«Nada mejor que una ministra de Relaciones Exteriores esté en París la primera mañana en su nuevo cargo», enfatizó la ministra.
Le Drian se mostró satisfecho de continuar «con Annalena» la relación de confianza que había mantenido con su predecesor, Heiko Maas, y añadió que la relación entre los dos ministros de Relaciones Exteriores es «un poco el tesoro de la relación franco-alemana al servicio de Europa», algo esencial, «por no decir vital, para nuestros dos pueblos».
A pesar de los tonos casi efusivos, Baerbock mantuvo su rechazo a los planes franceses de clasificar la energía nuclear como energía «verde».
«Es bien sabido que tenemos posiciones diferentes en la cuestión nuclear», dijo, apuntando que la cuestión de la llamada taxonomía se está debatiendo en todos los planos, incluso entre el nuevo canciller alemán, Olaf Scholz, y el presidente francés, Emmanuel Macron, así como a nivel europeo en Bruselas.
Scholz tiene previsto viajar a París para reunirse con Macron en su primera visita oficial a Francia como canciller.
En el marco de la UE sigue siendo especialmente controvertido si la energía nuclear y el gas también pueden considerarse sostenibles.
Francia, junto con Polonia, República Checa y otros países, quiere etiquetar la energía nuclear como «verde» a toda costa. Alemania, Luxemburgo y Austria, entre otros, se oponen rotundamente.
Asimismo, Baerbock amenazó a Rusia con graves consecuencias en caso de que se produzca una escalada en el conflicto con Ucrania.
«Rusia pagaría un alto precio político y, sobre todo, económico, por una nueva violación de la condición de Estado de Ucrania», declaró Baerbock, instando a evitar una escalada militar en la región fronteriza entre ambos países y a buscar una solución diplomática.
Baerbock y Le Drian dijeron estar dispuestos a comprometerse profundamente para buscar una solución.
En una comparecencia conjunta con la ministra alemana en Bruselas, Borrell advirtió a Rusia contra un ataque a Ucrania, agregando que la UE está dispuesta a utilizar «todos los instrumentos disponibles» en apoyo de la soberanía y la integridad territorial de Ucrania.
La UE está debatiendo el envío de instructores militares a Ucrania. La posible reacción comunitaria a un ataque ruso podría consistir en nuevas y severas sanciones económicas. Baerbock recalcó: «Hemos subrayado nuestra solidaridad común hacia Ucrania».
El conflicto entre Rusia y Ucrania ha seguido intensificándose en las últimas semanas. Estados Unidos acusa a Rusia de desplegar tropas no lejos de la frontera con Ucrania. Occidente teme una invasión rusa de la antigua república soviética. Rusia lo rechaza.
A su llegada a Bruselas, Baerbock indicó que una mayor soberanía estratégica de Europa frente a Rusia y China, por ejemplo, significa «que busquemos la cooperación siempre que sea posible y reforcemos la acción independiente cuando sea necesaria».
Agregó que no se trata «solo de una cuestión militar, sino sobre todo de una cuestión de diplomacia, de Estado de derecho y de una fuerte cooperación económica en la Unión Europea».
Paris/Bruselas (dpa) – Vie, 10.12.2021, 9.40 am