Varias manifestaciones del 1 de Mayo se tornan violentas en Alemania

Un policía y un manifestante se enzarzan en una pelea en Berlín. Foto: Christophe Gateau/dpa

Violentos choques entre la policía y manifestantes empañaron las concentraciones para celebrar el 1 de Mayo en varias ciudades alemanas.

El sindicato de la policía (GdP) de Berlín estimó hoy que más de 50 policías resultaron heridos tras los enfrentamientos. Un comunicado del sindicato indica que tres agentes fueron trasladados al hospital con huesos rotos.

«Por supuesto, aún no tenemos cifras definitivas, pero a la vista de los más de 50 compañeros heridos ya conocidos y de las más de 250 detenciones, está claro que nos hemos alejado de nuevo de un Primero de Mayo pacífico», dijo el vicepresidente regional del GdP, Stephan Kelm.

Una marcha organizada por un grupo de izquierdas y anunciada como «Manifestación Revolucionaria del Primero de Mayo» en Berlín terminó prematuramente cuando la multitud se volvió tan ruidosa que el propio organizador se quejó de haber sido agredido.

Entre 8.000 y 10.000 personas se echaron a la calle, según cálculos de la Policía. Se lanzaron piedras y botellas contra los agentes y se incendiarion contenedores de basura. La policía utilizó spray de gas pimienta en algunos casos y detuvo a unas 250 personas.

Alrededor de 5.600 policías fueron destacados en la capital. Incluso después de que comenzara el toque de queda a las 22:00 horas, muchas personas salieron a la calle como ocurrió en el popular barrio de Kreuzberg, mientras otras lo celebraban con música en el parque Mauerpark.

Tres agentes resultaron heridos por la pirotecnia lanzada por manifestantes. Según una estimación inicial, unas 20 personas de los servicios de emergencia también sufrieron lesiones. La jefa de la Policía de Berlín, Barbara Slowik, condenó los ataques, calificándolos de «inaceptables».

Antes de que se disolviera la marcha, la gente ondeaba banderas, llevaba carteles y gritaba consignas contra la policía. Algunos de los asistentes estaban ebrios, afirmaron fuentes policiales.

A primera hora del día, 10.000 ciclistas asistieron a una concentración anticapitalista en el elegante barrio de Grunewald.
Otros acudieron a una concentración en la que se pedía la reanudación de los clubes y la vida cultural.

Mientras tanto, en el distrito oriental de Lichtenberg, unas 200 personas acudieron a protestar contra las restricciones impuestas para frenar la pandemia.

En otras decenas de ciudades se llevaron a cabo actos similares.
En Hamburgo, la policía utilizó cañones de agua para disolver una concentración frente a un centro cultural de izquierdas. Cientos de personas se reunieron allí por la tarde sin respetar las normas de distancia social.

Más tarde, la Policía de Hamburgo detuvo una manifestación de izquierdas no autorizada y retuvo a unos 150 asistentes en un parque no lejos del centro.

Más de 3.000 personas acudieron a una marcha en Fráncfort, según cifras policiales. Las fuerzas de seguridad detuvieron a algunos participantes por lanzar fuegos artificiales y atacar a los agentes, y utilizaron cañones de agua para dispersar la manifestación.

La violencia se agravó en el evento, que se anunciaba como un «Día de la Furia». Al menos dos manifestantes necesitaron atención médica. Agentes policiales informaron de varios heridos en sus filas.

Mientras tanto, la Policía de la ciudad oriental de Leipzig también fue atacada con objetos y petardos cuando intentaba dispersar una manifestación. Varias personas fueron detenidas.

En Erfurt, fuentes policiales dijeron que 240 vehículos participaron en una caravana convocada por la ultraderechista Alternativa para Alemania. Paralelamente, cerca de 170 personas participaron en una marcha del ultraderechista Partido Nacional Democrático (NPD) en Greifswald.

La mayor manifestación en Baviera fue la que reunió a 7.500 motociclistas en Núremberg para oponerse a la posible prohibición de conducir durante el fin de semana.

Berlín, 2 may (dpa)