La comisión gubernamental que estudia medidas restrictivas en el tráfico para reducir los efectos del cambio climático en Alemania acordó inversiones pero no logró acordar medidas para alcanzar las metas fijadas para 2030 durante la larga reunión finalizada hoy por la mañana, según pudo saber dpa.
Tras 17 horas de deliberaciones sí hubo un acuerdo para obtener más coches eléctricos y cuantiosas inversiones en transporte público y digitalización. Tema de disputa fue la cuota de coches eléctricos, y a las críticas de la oposición al ministro de Transporte, Andreas Scheuer, se unieron los socialdemócratas, socios de Gobierno. La industria, por su parte, habló de importantes avances.
El ministro de Transportes fue acusado de limitar el alcance de las propuestas, según dijo a dpa el vicepresidente del grupo parlamentario del SPD, Matthias Miersch.
La comisión integrada por asociaciones medioambientales, industria y municipios debía sugerir cómo reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en el tráfico, de 170 a menos de 100 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) en 2030.
Según los participantes, los compromisos logrados todavía dejan una brecha de entre 16 y 26 millones de toneladas de CO2.
Los expertos acordaron el objetivo de llegar a registrar hasta diez millones de coches eléctricos para 2030. El Gobierno debería considerar poner precio a las emisiones de CO2 en todos los sectores que no están cubiertos por el comercio de emisiones de la UE, propusieron. Este precio encarecería los coches con alto consumo de gasolina, por ejemplo.
No hubo acuerdo, entre otras cosas, sobre un posible límite de velocidad general en las autopistas o sobre sistemas de bonus malus como incentivo para la compra de automóviles respetuosos con el medio ambiente. También hubo disputas sobre si fomentar únicamente la movilidad eléctrica, o apoyar el uso de biocombustibles.
El vicepresidente del grupo parlamentario socialdemócrata, Sören Bartol, señaló que (el ministro) Scheuer ahora tiene que hacer sus propias propuestas. «La responsabilidad no se la quitará nadie», aseguró.
Scheuer, del partido conservador CSU, se opuso de antemano a mayores impuestos o a la limitación de la velocidad en las autopistas, pero subrayó que la movilidad del mañana debe ser eficiente, digital, pagable y respetuosa del clima.
El líder del grupo parlamentario de los Verdes, Anton Hofreiter, dijo que el Gobierno federal debe responder. «El tiempo para posponer las decisiones valientes ha terminado», comentó. Por su parte, el vicepresidente del mismo grupo, Oliver Krischer, opinó que «con un ministro que se mantiene al margen, Alemania no tiene un futuro en la movilidad».
El Ministerio remitió hoy al informe de la comisión. Las propuestas se incluirán en un informe provisional bajo el título «Plataforma nacional, Futuro de la movilidad».
Berlín, 26 mar (dpa)
