Tras 90 años en servicio, la histórica estación del tren cremallera que lleva al monte Zugspitze, en Garmisch-Partenkirchen, será reemplazada por un nuevo edificio, informaron hoy desde la compañía operadora.
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Muchos de los aproximadamente 500.000 visitantes que cada año llegan para visitar el pico más alto de Alemania, el Zugspitze, de 2.962 metros, utilizan este tren.
El viaje, de más de una hora, entre Garmisch-Partenkirchen y la estación Zugspitzplatt es considerada una atracción turística.
La estación actual de Garmisch-Partenkirchen será trasladada a un nuevo sitio. «El nuevo edificio, literalmente, nos catapulta de la Edad de Piedra a la Edad Moderna», señaló hoy Matthias Stauch, director comercial de la empresa operadora Bayrische Zugspitzbahn.
Las vías también se reubicarán y se planea una nueva área administrativa. El coste estimado es de nueve millones de euros (10,21 millones de dólares). No se ha decidido aún qué sucederá con el edificio antiguo de la estación, que data de 1929, añadió Stauch.
A partir del 29 de abril, debido a los trabajos de construcción, los pasajeros deberán tomar un autobús entre las estaciones de Garmisch-Partenkirchen y Kreuzeck.
Garmisch-Partenkirchen (Alemania), 21 feb (dpa)
