El hecho que las personas se hayan acostumbrado a videoconferencias y teletrabajo durante la pandemia de coronavirus también brinda nuevas posibilidades a las pequeñas comunidades rurales, según un estudio publicado hoy.
«Vivir en el campo se está convirtiendo en una alternativa real para muchas personas», explicó hoy Catherina Hinz, jefa del Instituto de Berlín para la Población y el Desarrollo. Por lo tanto, expresó, para algunas comunidades rurales esto se convierte en una posibilidad de recuperar habitantes.
Junto con la Fundación Wüstenrot, el instituto investigó lugares de trabajo con apoyo digital en las zonas rurales, incluidas las oficinas compartidas, los nuevos conceptos de vivienda, las jóvenes empresas digitales y las iniciativas culturales.
El resultado de este análisis fue que, pese a la revitalización de las comunidades rurales, las mudanzas a gran escala desde las ciudades a estas zonas aún deberán esperar. Pero, aclaró Hinz, un cambio de tendencia es más probable, ya que la cultura presencial en las empresas está cambiando.
El estudio nombra ejemplos, como el de Ballenstädt en Sajonia-Anhalt, donde una finca se convirtió en un laboratorio de ideas. Y Homberg, en el norte de Hesse, que invita a 20 creativos y trabajadores digitales a experimentar durante un par de meses la vida rural.
Wiesenburg, en Brandeburgo, planea una «coaldea», un nuevo barrio con pequeñas casas, pero grandes espacios comunes, también para trabajar. Tras el estudio, 56 de estos proyectos mostrarán cómo se modifica la vida en las zonas rurales.
«La digitalización puede ayudar como impulsora de mudanzas», apuntó el coautor del estudio Manuel Slupina, quien de todas maneras advirtió que muchas veces aún faltan conexiones de Internet de alto rendimiento y que no alcanza un cable de banda ancha.
Afirmó que las comunidades también deben ser fácilmente accesibles, contar con buenos servicios de asistencia y respaldar a las personas creativas. Slupina añadió que donde ya hay proyectos residenciales y espacios creativos será más fácil para quienes llegan.
Berlín, 21 abr (dpa)